La columna de William Alfaro: Diego Coca, el regreso del 10

Diego Coca, el regreso del 10
William Alfaro|@WilliamAlfaroSV |Periodista Deportivo




A muchos no les sonará en nada el 25 de junio de 2013, pero ese día marcó un hito en la historia reciente del fútbol salvadoreño, y para ello hay que viajar hasta Turquía, a la ciudad de Rize, donde dos adolescentes y junto a ellos una camada de muchachos vestidos con la camiseta de la Selecta Sub 20 nos regalaron quizá la victoria más dulce de El Salvador en una competición mundialista, al margen de lo hecho por la Selecta Playera que es un tema aparte.
Ese día en Rize, José “Puma” Peña y Diego Coca anotaron el 2-1 frente a Australia que ha significado la única victoria de El Salvador en una copa del Mundo de FIFA. Para cuando llegue junio se cumplirán cinco años de esta hazaña y curiosamente esos dos muchachos que para entonces tenían 18 años, después de muchos altibajos en Primera se han vuelto a reunir y están dando de qué hablar con un equipo chico, Municipal Limeño, dirigido ahora por el argentino Emiliano Barrera, de 36 años.

Por estos días, de quien hablaré, Diego Coca tiene 23 años y es el líder de goleo del Clausura 2018 con dos dobletes. Ya algunos me cuestionaron, por una mala lectura, después de haber pedido que el 10 y capitán del Limeño tenga un gran 2018.
 
Lo reconozco, yo quiero que Diego Coca, Puma Peña, Jairo Henríquez, también de Limeño, y otros jóvenes como Roberto Carlos Domínguez del Santa Tecla, tengan no sólo un 2018 en grande, quieron que la rompan en los siguientes años.
 
¿Por qué?, se preguntarán algunos. Sencillo, porque ellos son los llamados a tomar el relevo generacional de la Selecta mayor, y en sus manos, tacos o zapatillas, o como quiera llamarlos, estará la eliminatoria a Qatar 2022.
 
Ya lo sé, ya lo sé, ahora se vendrán otros, o “los mismos”, diciendo que no tenemos selección, que primero debemos limpiar a la Fesfut, y las dos son verdades irrefutables, pero para cuando llegue el momento de la eliminatoria necesitaremos que nos representen nuestros mejores valores y para entonces Diego Coca, ese muchacho del que ahora hablo, tendrá 27 años, y como amo los colores de la Selecta, quiero lo mejor para ella. No se trata de humo como tanto se habla últimamente en nuestro medio, “se trata de confianza, de trabajo, perseverancia y fe”, palabras que se las tomo prestadas al Diego del Municipal Limeño.

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